HIMACS: Les Olivades Marrakech

Situado a 17 km del constante bullicio de la ciudad, el complejo Les Olivades Marrakech transmite de inmediato un lujoso estilo contemporáneo, rodeado en su totalidad por un paraíso de sesenta hectáreas repleto de olivos y naranjos marroquíes.

Esta villa posee cinco habitaciones con baño privado, cocina exterior e interior, y múltiples espacios destinados para el ocio y descanso de sus huéspedes. Cada estancia se ha diseñado con un equipamiento de excepcional calidad, solo igualado por los acabados de sus extensas terrazas y piscina.

Acompañando la cálida estética de los interiores de esta moderna residencia de color arcilla, la cual se mimetiza a la perfección con los alrededores, llama la atención su impresionante exterior, que cuenta con el Alto Atlas como telón de fondo.

Tanto para el diseño interior y exterior del proyecto, se ha utilizado de forma dominante las propiedades técnicas y estéticas de la piedra acrílica HIMACS.

Este material cuenta con una capacidad termoformable que permite que pueda ser moldeado en infinidad de formas y diseños. Compuesto por minerales, acrílico y pigmentos naturales que se combinan para obtener una superficie suave, no porosa y sin juntas visibles, satisface los más altos estándares en materia de estética, fabricación, funcionalidad e higiene, y brinda numerosas ventajas en comparación con los materiales convencionales.

En el interior de Les Olivades Marrakech, HIMACS está presente en los lavabos y las encimeras que componen los cuartos de baño, los cabeceros de las camas, el área de despachos, las cocinas, e incluso algunos muebles y obras de arte, algo que proporciona una cohesión y un flujo continuo con las zonas exteriores.

Y es en el exterior donde esta villa muestra la verdadera versatilidad de este material. Desde las mesas del patio y las hamacas curvas semisumergidas en la piscina, hasta sus bordes y los canales de drenaje, pasando por las esculturas firmadas, se ha elegido la piedra acrílica HIMACS en el tono Alpine White. La elección de este icónico color blanco se debe a su facilidad para reflejar la luz y proporcionar una sensación de tranquilidad a la residencia.

Unos exuberantes prados verdes, perfectos para pasear descalzos, invitan a los huéspedes a admirar las numerosas e interesantes esculturas que adornan los jardines. Desde elementos sinuosos que serpentean por los ángulos del edificio hasta las estructuras cubistas flotantes que encierran antiguos olivos, la diversidad de estas obras crea un diálogo común con las plantas que conforman los jardines.

En la terraza principal de la residencia, la piscina de 25m ha recibido la misma atención arquitectónica que sus estancias interiores: recta y lineal en su diseño, pero tremendamente apetecible para disfrutar del descanso. Al lado de esta, y bajo la sombra de una gran pérgola, se ubica un área de chill out con grandes sofás para disfrutar del paisaje y protegerse del sol.

Con alusiones a las fortalezas del desierto en el diseño de sus patios interiores, Les Olivades Marrakech susurra la historia de la región en la que se ubica, y proporciona una amplia inspiración para el yoga, la meditación y la relajación.

Este tipo de proyectos tan excepcionales se merecen materiales de la más alta calidad y, en el resultado, este compromiso destaca por encima de todo.